El psicoanalista uruguayo Jorge Bafico acaba de publicar El origen de la monstruosidad (Urano, 2015), un recorrido por la vida y la obra de muerte de algunos de los asesinos seriales más impactantes de los últimos años.  Desde Ted Bundy hasta John Wayne Gacy, Bafico explora los mecanismos psíquicos que permiten que un hombre planifique la muerte de otro, transformando la pulsión homicida en un placer compulsivo.

Los asesinos en masa llegan a los lugares públicos y comienzan a matar; habitualmente no tienen planeado su escape.

¿Qué define la patología del asesino serial y qué lo diferencia de un killer profesional?

Para aplicar el concepto de asesinos seriales, tenemos que hablar del ex agente del FBI Robert Ressler, ya que fue el primero en introducir el término serial killer (asesino en serie). Los asesinos seriales propiamente dichos se caracterizan por matar un mínimo de tres a cinco personas en más de un día entre un crimen y el siguiente. El asesino no tiene relación previa con las víctimas y el crimen ocurre al azar o sin conexión con los otros. Además Ressler plantea una diferenciación entre los asesinos seriales y los asesinos en masa y los spree killers. Los asesinos en masa son aquellos que llegan a los lugares públicos y comienzan a matar a varias personas; a veces se suicidan y habitualmente no tienen planeado su escape. Por lo general, el asesino en masa es un hombre de unos veinticinco a cuarenta años de edad, que muy probablemente padezca de algún problema mental. Se presentan como sujetos con una infancia de violencia y fueron rechazados por parte de alguna institución militar o poli­cíaca. Suelen llegar armados, vestidos con trajes mili­tares. Matan a todos aquellos que se interponen en su camino, sin importar de quiénes se trate, aunque la mayoría de las veces son indivi­duos que personifican la causa de su furia. Los spree killers matan súbitamente a muchas personas y en períodos muy cortos; el serial, por el contrario, toma su tiempo para cometer cada asesinato. El spree killer representa a un asesino de tipo mixto. Se asemeja al asesino serial, pero su accionar es muy veloz y sus motivaciones no son las mismas que el asesino serial. Se trata de hombres cuya edad oscila entre los 20 y los 30 años. Este tipo de criminal tirotea a la gente al igual que el asesino en masa, pero —a diferencia de este— trata de pasar desapercibido y huye tanto del público como de la autori­dad. Generalmente actúa como franco­tirador y pasa inadvertido tanto para el público como para la autori­dad.

¿Los asesinos nacen o se hacen? 

Somos producto de nuestra historia, sobre todo se marcan en la infancia. Ressler introdujo el concepto de un perfil psicológico específico del asesino serial y partió de la idea de que sus comportamientos, precursores del asesinato, siempre han estado presentes, desde la infancia. Dicho de otra manera, la infancia sería de alguna manera el motor de los crímenes.

¿Un «monstruo moral» lleva más allá las normas de una sociedad o irrumpe sobre la moral en sí misma?

El psicoanalista Jacques A. Miller leyendo a Freud plantea que lo inmoral es una parte de nuestro ser. El psicoanálisis ha demostrado que nuestro ser incluye esa parte desconocida, el inconsciente reprimido, que está dentro de cada ser humano. Somos criminales inconscientes y eso aflora en la conciencia –principalmente en la conciencia obsesiva– como sentimiento de culpa. La mayoría metaboliza esto en sueños y fantasías, pero algunas personas pasan ese límite y lo llevan al acto, como las historias que aparecen en este libro.

Vi varios asesinos, ya que durante mas del 10 años trabajé como psicólogo en diferentes cárceles de Uruguay.

¿Por qué decidiste estudiar a grandes asesinos?

Siempre me generó mucha curiosidad el homicidio enigmático, aquel que carece de un móvil como el económico, o pasional. De estudiante leí un trabajo de Lacan sobre el “Crimen de las hermanas Papin”, un crimen que conmovió la sociedad francesa en la década del 30. Lacan junto a otros intelectuales propuso una lectura del mismo: pasaje al acto le llamó. De todas las historias de asesinos seriales que estudié creo que Albert Fish y Garavito son las más terribles.

¿Conociste personalmente a un asesino?

Vi varios asesinos, ya que durante mas del 10 años trabajé como psicólogo en diferentes cárceles de Uruguay. Recuerdo, hace años, entrevisté a un recluso procesado por homicidio. Había entrevistado a varios, pero su caso era particular. Se trataba de un homicida que había matado salvajemente a su esposa a tijeretazos, había herido a dos policías y luego se había auto mutilado. La escena había sido terrible, la impresión que uno tenía es que se encontraba frente a un ser destructivo y cruel, un verdadero monstruo. Después de atacar a su mujer y a los policías, se cortó el abdomen y estuvo al borde de la muerte. Quedó en cuidados intensivos en coma farmacológico por dos semanas. Cuando despertó, lo primero que hizo fue preguntar por su esposa. No tenía registro alguno de lo que había pasado. Sin embargo la primera vez que lo vi daba una sensación de fragilidad indescriptible. Este hombre era un psicótico, un loco que nunca había delirado, ni antes ni después del homicidio, simplemente explotó en un acto loco y feroz. Los psicoanalistas llamamos a eso «pasaje al acto». Este homicidio se inscribió bajo el modo de la urgencia y lo enigmático. De ahí la dificultad para poder entenderlo/////PACO