Ana Logue (Buenos Aires, 1984) es DJ residente en fiestas como la Jolie o la Warhol y en Indie Bar. También hace prensa, comunicación y fue DJ oficial del camión Jolie en la Marcha del Orgullo 2012. Es freelancer, vive en Gerli y cree en Morgan Freeman y en Jacobo Winograd.
-¿Cómo empezaste como DJ?
-Empecé en 2008, como warm upper de una fiesta que era más bien rockera. Tenía una necesidad de escuchar algo bueno, y a la vez poder bailarlo sin sentir que me estaban estafando. Trabajé un tiempo metiendo gente en fiestas como la Atomic/Vintage y las primeras Avantt, asi que esa de escuchar el compiladito y los mismos temas una y otra semana me terminó saturando. Cuando dejé eso pensé, «¿por qué nadie piensa en lo que realmente le gustaría escuchar?» Y arranqué.
-¿Por qué el nombre Ana Logue (además del pun, obvio)?
-Bueno, yo soy una Ana, así que daba. Y siempre sentí que lo mío iba más por lo análogo, por entender lo que quiere la gente, un poco mimetizarme con la energía del momento. Despues de todo, los DJs tambien somos público, y si hacés algo por la plata o para caer bien nada más, estás incompleto.
-¿Cómo elegís la música?
-Me gusta armar sets temáticos. Elijo música en función del público primero (edad, estilo, gustos y pedidos) y después de la fecha. Si sé que cumple años un músico, y que a ese público le gusta, meto temas, versiones, colaboraciones. Si sé que quieren festejar trash, les pongo esa música que no da pasar nunca, pero si te vas a reir, te reís fuerte. Tengo en cuenta los guiños, porque sé que eso es lo que hace que la gente diga «la noche estuvo buenísima, quiero volver a bailar acá». Pasé y paso música para chicas les y bi, para público gay, para oficinistas, para cumpleañeros, despedidas de soltera, y hasta para un chino que cumplió 40 años con su familia. Pero siempre la onda está en divertirse y divertir y la gente de eso siempre se da cuenta.
-¿Qué se siente ser mujer y DJ? ¿Hay discriminación en el circuito? ¿Las DJs mujeres la ponen tanto como dicen que la ponen los DJs varones?
-Ser mujer y ser DJ es algo así como ser mujer y hacer música: las féminas suelen ser el accesorio, no las protagonistas, y todo bien con las que se sienten cómodas, pero yo no nací para groupie. Hay una idea de que la mujer en general sabe menos que los varones en música, libros, comics, etcétera, y no es así. Obviamente que siempre está la minitah que pela escote y por eso puede pasar dos o tres temas, o «la novia de», pero las que hacemos las cosas a conciencia la remamos mucho hasta que nos dan un espacio. Investigar, averiguar sobre lugares y movidas, meterse a ver equipos, pedir prestado, escuchar de todo, enganchar onda con bandas locales, todo suma, y eso es algo que muchos DJs hombres no hacen porque no lo necesitan. Y la verdad, me han avanzado más mujeres que varones. El tipo le tiene miedo a la mujer con poder, y ser la que elige qué bailar en una pista es muy parecido a ser una superheroína, aparentemente.
-¿Qué música escuchás para relajarte?
-Últimamente no me relajo mucho, y aguante que sea así. Pero si quiero bajar escucho música de artistas como Sia o Feist, lentos de los 80’s o Soundgarden. Escuchar temas como «An unkind» puede relajar -o bajonear- a cualquiera.
-Gangam Style, ¿sí o no?
-Es el tema que te hace zafar actualmente. Paso demasiada música para demasiada gente diferente, a veces es una bocanada de aire fresco cortarla con Amar Azul y poner un PSY.
-¿Qué tiene Gerlywood que no tenga Las Cañitas?
-Gerlywood tiene al histórico Ricky Espinosa, y es cuna de calidad. Podríamos considerarnos el Springfield de zona sur. De cualquier Palermo no se puede decir tal cosa. Ya tendré mi placa conmemorativa en alguna esquina.
-¿Qué hacés si te vienen a pedir un reggaeton?
-Sonrío, pongo Miss Bolivia o Calle 13 y sigo mi camino. Despues de todo, la DJ soy yo.///PACO.