Historietas


Batman v Superman: batalla de críticos


Pocas veces quedó más claro que existen tantas, infinitas lecturas de un hecho o una obra con la masiva repercusión extra cinematográfica del reciente tanque comiquero-hollywoodense
Batman v Superman: El origen de la justicia. Aún días antes de su estreno, gracias a lo que no podemos más que considerar una astuta campaña de marketing basada en el principio de “no importa lo que digan mientras que hablen” apoyada en variadas avant premieres, las redes sociales y los medios (mayormente los “del palo”, pero los medios en general) se llenaron de críticas, comentarios, piezas de opinión, berrinches, hipérboles, debates, intercambios de insultos y acusaciones de sobornos por parte de estudios cinematográficos competidores. Todo por una película carísima pero con la vida útil de una mariposa.

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Aún días antes de su estreno, se llenó de críticas, comentarios, piezas de opinión, berrinches, hipérboles, debates, intercambios de insultos y acusaciones de sobornos por parte de estudios.

Sin lugar a dudas hay elementos de entrecruzamiento entre la anticipación generada por una nueva iteración de estos icónicos personajes, el fenómeno de las películas de este género liderado por Disney/Marvel y la consecuente respuesta de su rival Warner/DC y una maquinaria de hype que viene fogueando el fanatismo y la curiosidad desde hace más de un año. Pero nada de esto explica completamente lo que viene pasando las últimas dos semanas. Algunas de las preguntas posibles que nos podemos hacer para intentar explicarlo serían: ¿Qué llevó a este debate, independientemente de la maquinaria del estudio? ¿Qué fibra tocó en la ya hipersensibilizada y gatillo-fácil comunidad comentadora? ¿Somos realmente tan reaccionarios ante el más mínimo estímulo. Prefiero analizar desde una segmentación del público comentador, reparando en algunas de las interacciones que se fueron generando (que podemos esperar se sigan generando en el futuro con respecto a otras piezas similares). Identifico 4 grandes grupos con sus respectivas subcategorías (haciendo la salvedad que ninguna de estas categorías es discreta y existen múltiples intersecciones):

  1. Críticos
    1. “serios”
    2. “de entretenimiento”
    3. Nerds multimedia analistas de cultura pop
  2. Comiqueros
    1. en general
    2. DC fundamentalistas
    3. DC linea fundadora
    4. Nerds “nueva ola”
  3. Mongo analistas y oportunistas
  4. Público en general

1.a – Los Críticos Serios sienten que les hicieron una emboscada: si quieren trabajar de manera más o menos masiva se ven obligados a salir del ghetto de cine de festivales, clásicos e independientes, pero mientras que en décadas pasadas podrían haber destruido de un plumazo una película de genero como ésta, sienten que el involucramiento de directores “en el borde” como Christopher Nolan los obligan a ver y comentar BvS como una película más. Ahí es donde se encuentran con una película que es formalmente mala, pésimamente escrita, dirigida y actuada, y salen a decirlo haciendo mil descargos sobre cómo evaluar “en la curva”, pero sin poder ocultar que les parece una soberana porquería. Estos Críticos son vistos como el enemigo por varias de las categorías descritas más abajo. Entiendo que sólo están haciendo su trabajo.

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Los Críticos de Entretenimiento son esa ya no tan nueva ola de críticos que aprecian (o se obligan a apreciar) el cine considerado “menor”, que incluye al de acción, comedia romántica y comedia burda y de género estricto.

1.b – Los Críticos de Entretenimiento son esa ya no tan nueva ola de críticos que aprecian (o se obligan a apreciar) el cine considerado “menor”, que incluye al de acción, comedia romántica y comedia burda y de género estricto. Son aquellos que por defender al spaghetti western como válido terminaron escribiendo hagiografías de Adam Sandler. Este subgrupo siente que naturalmente tiene que salir a defender al mega-tanque de lo que dicen los 1.a, salvo que se encontraron con una película pretenciosa y aburrida que no respeta ni su propio lenguaje de género. Algunos de ellos aun así salieron a defenderla, lo que fue considerado por gente tales como del grupo 2 como “comprados por el estudio”, cuando en realidad salieron a defender lo indefendible para bancar los trapos, lo que los une, irónicamente, con los 2.b.

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El Nerd Multimedia es un fenómeno milenial bancado por medios que o efectivamente tienen a ese segmento como audiencia o medios tradicionales que creen que van a captar a un segmento que nunca estuvo en primer lugar.

1.c – El Nerd Multimedia es un fenómeno milenial bancado por medios que o efectivamente tienen a ese segmento como audiencia o medios tradicionales que creen que así van a captar a un segmento que nunca se alejó porque nunca estuvo en primer lugar. El nerd multimedia comenta el fenómeno completo alrededor de la película, el marketing, el merchandising, los trailers, la posición de mercado de Marvel y DC, la importancia hacia el “universo ampliado” de la película… para luego emitir su opinión, que se verá coloreada de acuerdo a cual de las sub categorias de 2 se identifique (siempre se identifica con alguna). Nótese que se lo usa en la función “crítico” pero en la categoría “de lo que venga” y que por supuesto carece de las herramientas técnicas de 1.a y 1.b y mañana podría estar comentando un paquete de figuritas o un video juego. El nerd multimedia se ve reflejado en la burda caricatura que es el personaje de Lex Luthor pero nunca lo admitiría en público.

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El Comiquero en General no puede creer la suerte que tiene de tener la edad y poder económico para disfrutar de esta bonhomía comiquera que estamos viviendo.

2.a – El Comiquero en General es una categoría pequeña y que se sigue reduciendo en la medida que se hemorragia hacia alguna de las otras sub categorías, y que no se renueva ya que la sangre nueva es casi toda 2.d. El Comiquero en General no puede creer la suerte que tiene de tener la edad y poder económico para disfrutar de esta bonhomía comiquera que estamos viviendo. Considera que cualquier película de superhéroes, aún las horribles, son buena noticia. Puede haberle gustado o no la película, pero en general la celebra como el logro que significa para su gente. Y se queda tranquilo de haber entendido todas las referencias, aun las más crípticas, esas que la categoría 4 ni registraron que estaban ahí en primer lugar.

2.b – Imposible entender la categoría de DC Fundamentalista sin hacer un intertexto con la nota sobre fanáticos publicada aquí mismo. Lo más extraño es que nadie sabía que existían (estaban camuflados como 2.c) hasta que comenzaron las campañas de BvS y la futura Suicide Squad. Como lo explica mejor Tajer, el Fundamentalista se define en contra de, en este caso, en contra de lo que percibe como fundamentalistas de Marvel, que como ya veremos más abajo, no existen como especie separada de 2.a o 2.d en nuestro país. El Fundamentalista sale a bancar el proyecto incondicionalmente, aun si esto significa justificar lo injustificable, atacar a mansalva al disidente o acusarlo de “pago por”. Considera que el 2.c es un blando, o en el caso de que no le haya gustado la película, de “marvelita en el closet” (?). Obviamente considera que BvS es la Mejor Película del Mundo Mundial.

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El DC Línea Fundadora es más parecido al fan de DC internacional, y que generalmente, por cuestiones de edad y mercado, fue sometido al producto de DC antes que el de Marvel.

2.c – El DC Línea Fundadora es más parecido al fan de DC internacional, y que generalmente, por cuestiones de edad y mercado, fue sometido al producto de DC antes que el de Marvel, ya sea por las ediciones de Novaro (los más grandes) o Perfil (más, pero no tan, jóvenes). El problema del Línea Fundadora es su amor a los personajes: por un lado, no puede resistir una nueva encarnación de los mismos, por el otro nunca va a considerar que la versión representada es menos que un pobre reflejo de “sus” personajes. El Línea Fundadora aún no se terminó de recuperar del final de Man of Steel y lo hacen comerse una secuela que además tiene un Batman que mata. Solamente impide que se largue a llorar el ver paneles de The Dark Knight Returns, Crisis on infinite Earths o Final Crisis en pantalla. (Descargo: el autor de esta nota se encuadra sin vergüenza alguna en esta categoría).

2.d – El Nerd Nueva Ola es otro fenómeno milenial como el 1.c (es como un 1.c sin exposición mediática) que fue engordado a base de la super exposición a los productos de género de la última década y media (y tal vez un poco antes, a través de producciones animadas como las series de DC o la serie de los X-Men). El Nerd Nueva Ola más allá de que muchas veces solo ha tenido visibilidad de Marvel vía su universo cinematográfico y DC a través de Batman, compra el paquete completo. Defiende los nuevos modos de consumo que incluyen el teaser, el trailer, el making of y los spoilers. El Nueva Ola defiende a la película dentro de sus parámetros de consumos culturales que no incluyen los conceptos de “está buena” o “no me gustó tanto”, y tiene que maximizar la explosión actual ya que va surfeando entre efímeras olas y en menos de un mes tiene que hacer la misma defensa de Captain America: Civil War. Ser un Nueva Ola puede ser agotador.

3 – Claro, gran visibilidad mediática significa, Oportunistas. Entran en esta categoría los de siempre (medios que llegan tarde a todo, figuretis, celebrities que garronearon una entrada, gente a la que le gusta pelear en las redes y en los espacios de comentarios), que generalmente no saben la diferencia entre Marvel y DC, creen que Batman todavía es Adam West y pronuncian mal los nombres de los actores; pero también los Mongos, que son los que hacen LECTURAS de la película en “contexto político social”, ven a Batman como Trump o consideran a Luthor KAKAKUKA o que volvemos a los 90. La mayoría de ellos no vieron la película, solo leyeron los comentarios.

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El Nueva Ola defiende a la película dentro de sus parámetros de consumos culturales que no incluyen los conceptos de “está buena” o “no me gustó tanto”.

4 – Finalmente, el Público en General, o Gran Público, el que va a hacer que el estudio recupere la millonaria inversión. El que quiere ver “una pochoclera”, una con gente bella o con explosiones, que va a disfrutar cuanto más fuerte se escuche, más grande sea la pantalla y más 3D puedan disfrutar. Este Público en general es inmune a la crítica, tanto la especializada como la que no, pero tampoco come vidrio: el boca en boca es clave, y si bien el mérito a ser evaluado es el factor entretenimiento, tampoco va a recomendar algo que le parece un clavo. Y ahí es donde está la gran pregunta, ¿qué va a pasar con este público, el que va luego de las avants y el fin de semana de estreno? ¿Van a quedar cegados por los espejos de colores, o se van a aburrir con la morosidad no intencional de la película? ¿Van a quedarse manijeados por ver las secuelas o confundidos por los crípticos mensajes destinados a los (relativamente minoritarios) integrantes del grupo 2? Esa es otra charla, una que empieza ahora////////PACO