.

“Dios es un drone predador”. Con esta frase, el predicador estadounidense Ed Young lanzó una serie de videos en su canal de YouTube. Aunque lo hizo en agosto, y con la intención de que las lecturas de sus sermones tuvieran mayor impacto y atrajeran más fieles a sus arcas, su operativo sigue viralizándose y dando que hablar.

El pastor abrió las puertas de la Fellowship Church en febrero de 1990 en una oficina alquilada. Hoy tiene siete campus-sucursales en Texas, uno en Florida y otro en Londres, es una de las iglesias con mayor concurrencia de fieles y una de las más influyentes de todo Estados Unidos. Su fundador es una de las personas más ricas y mediáticas del país. Su programa de televisión Ed young Television fue el primero de tipo religioso en salir al aire. E! Entertainment Television lo emitió en 2010. Actualmente, su propio canal y el de su iglesia transmiten en vivo las 24 horas.

Para ver la saga “Drones”, hay que darle play a los videos en su canal de YouTube. En el primero, lo que se ve en pantalla es la apertura de un show cuasi televisivo que, en un esfuerzo de producción, muestra el vuelo (y recorrido) de un drone filmado con la cámara que éste tiene incorporada. La estética es la misma que se usa en cualquier reality estadounidense: música electrónica bien arriba, una voz sintetizada que dice “alguien siempre está vigilando” y una gráfica de documental que anuncia “Drones” y le da el pase al conductor-predicador.

El set es un auditorio teatral y como parte de la escenografía se ve un drone predador estratégicamente iluminado. El pastor les da la bienvenida a sus seguidores y empieza su sermón. Para justificar el avión no tripulado que aparece sobre el escenario, en la presentación y en su discurso, Young aclara: “tratamos de usar cosas que se puedan identificar con nuestra cultura.”

No es la primera vez que Young apuesta a la “identificación cultural” con ideas o puestas polémicas. En 2008 lanzó Sexperiment, una especie de “copulación congregacional” en la que le pedía a las parejas de seguidores más jóvenes que tuvieran sexo cada día durante una semana y observaran el resultado. En esa oportunidad, la puesta en escena incluía una cama, a su mujer Lisa (obviamente pastora) y la posibilidad de un contrato con el New York Times para describir la experiencia en formato libro. El bestseller se publicó en 2012, año en que Young fue elegido como mejor pastor evangélico por el Dallas Observer. A partir de ese momento, su popularidad y economía alcanzaron niveles increíbles, tanto que compró un avión privado para uso de la iglesia con el cual viajó a Bahamas y otros paraísos fiscales, según los registros de la Administración Federal de Aviación estadounidense.

Por sobre todas las cosas, Ed Young es hoy un provocador. En todas las páginas web relacionadas con él -la personal, la de la iglesia, la del canal- hay un botón que dice give, sencillamente “dar”, y probablemente, cuando uno haga click, esté financiando cosas que dezconozca. A pesar de que el crowfunding para drones no sería mal visto en una sociedad como la estadounidense, acostumbrada a mimetizarse con cuanto fanático ande dando vueltas, por el momento las colaboraciones de los fieles ayudan a montar un avión no tripulado en el escenario, compararlo con Dios y hacer un show televisivo con un tema por lo menos controvertido.

Al parecer, cada vez que se amplía el campo de acción o utilización de un invento, se naturaliza su uso. De la misma forma, la terminología asociada a él se incorpora al vocabulario diario para no desaparecer. Que Young use un drone como metáfora de Dios, ¿significa que el avión no tripulado ya forma parte de la vida cotidiana?

Aunque todavía no existe página en internet que muestre en tiempo real cuántos drones sobrevuelan el mundo, la idea no es mala. El problema es que como no se los utiliza con el mismo objetivo que a los aviones, difícil es imaginar que pueda concretarse dado que muchos de ellos son “secretos” y rastrearlos sería complicado. Si bien hay de distintos tipos, tamaños y colores, y es cierto que no todos se usan con fines maléficos, no se puede ignorar que los predadores sí.

Los drones son una característica reconocida y distintiva del mandato de Barack Obama. En septiembre de 2001, bajo la presidencia de George W. Bush, Estados Unidos tenía cincuenta drones. A fines del año pasado contaba con un total de ocho mil (quinientos armados) y se calcula que para 2020 el número será treinta mil. Los de la especie “predador” matan indiscriminada y sistemáticamente en Pakistán, Yemen, Libia, Somalía, Afganistán y, desde el 15 de septiembre pasado, también en Irak y Siria.

Por otra parte, un predador es un animal que mata a otro para alimentarse, es decir, para sobrevivir. Así se garantiza la conservación y el balance del ecosistema. Comparar a Dios con un drone predador, ¿no le otorga entidad de controlador violento de masas? Quizás la razón por la que el pastor Young puede pensarlo de ese modo se debe a que posee una maestría en “Divinidad” y su conexión está más allá. ¿Acaso está “cazando” fieles? ¿Cuál es, en este caso, el grupo insurgente, separatista o terrorista que desafía la integridad de la fe? ¿Qué amenaza intenta amedrentar o directamente eliminar Young?

Cada lectura de la serie “drones” se basa en una de las características que se le atribuyen a Dios: es omnisciente, omnipresente y omnipotente. Si el Señor es como un drone, el aparato debería compartir los mismos atributos. Sin embargo, este tipo de aparato no “sabe todo”. De hecho, las cámaras que utiliza no pueden distinguir claramente (y desde cierta altura) un blanco destinado a ser eliminado de un civil cualquiera. Tampoco puede estar en “todos lados”: Estados Unidos encabeza la lista de países que los usan con fines militares pero los países que los utilizan domésticamente tienen regulaciones muy estrictas. Por último, si fuera “todopoderoso”, ya no habría problemas en el mundo porque habrían terminado con todas las amenazas terroristas en un abrir y cerrar de ojos.

O Nietzsche tenía razón -y llegó el momento de reivindicarlo- o el mundo entierra definitivamente al viejo loco alemán y la angustia de sus frases para incorporar la filosofía de Young, según la cual Dios está más vivo que nunca y tan cerca de la gente que se convirtió en un drone vigilante.///PACO